lunes, 1 de junio de 2009

LA TÉCNICA CRIMINALÍSTICA

La Técnica Criminalística o Forense, se ocupa del conjunto de medios y métodos científico-técnicos que se utilizan durante la investigación de los delitos a los fines del descubrimiento, fijación, ocupación e investigación de los distintos elementos, indicios, materiales o evidencias físicas halladas en el lugar del suceso o durante la realización de la inspección o de cualquier otra acción de instrucción que conlleve la búsqueda de estos elementos. Entre los medios que se utilizan podemos citar los maletines operativos, las lupas, equipos de iluminación especial para la inspección, lámparas ultravioletas, cámaras fotográficas y de video, microscopios y demás equipos complejos de laboratorio.

Durante el desarrollo de múltiples acciones se requiere utilizar en fin, una serie de medios y métodos especiales desarrollados por la parte técnica de la criminalística para tal fin. Como se puede ver a través de los ejemplos citados, algunos de ellos se utilizan durante el trabajo operativo y otro ya en los laboratorios una vez ocupados y trasladados los elementos que serán objeto de la investigación.

La Técnica Criminalística se agrupa de acuerdo a una serie de factores. En primer lugar, atendiendo a su origen histórico y a los medios técnicos que se utilizan, la metodología de trabajo y a que en algunas especialidades en general se trabaja con trazos, líneas, rayas, etc., o sea, huellas en general más o menos similares, bien producidas por el hombre o por los instrumentos con que él actúa durante la realización del delito.

Por otra parte, nos encontramos ciencias como la Química, la Física, la Biología, etc., que se han adaptado a las características del trabajo criminalístico, pero que por sus profundos contenidos de trabajo y complejidad de sus técnicas o medios han requerido su consideración como especialidades dentro de la ciencia Criminalística.

La Técnica Criminalística por tanto esta integrada por una serie de especialidades que varían sus denominaciones de acuerdo a cada país; teniendo en cuenta el desarrollo alcanzado por la Escuela Cubana de Criminalística estas especialidades han sido estructuradas de la forma siguiente:

La Fotografía y el Video.

La Trazologia.

La Dermatoscopia.

La Documentologia.

La Balística Judicial.

La Identificación de personas por los rasgos exteriores.

Las Investigaciones físico químicas.

La Biología.

Las Averias, Explosiones e Incendios.

Las Aplicaciones Químicas Operativas.

La Técnica Canina y La Odorologia.

Por lo que seguidamente abordaremos cada una de estas especialidades:


La Fotografía y el Video

Es el conjunto de métodos fotográficos y de utilización de las técnicas de video que especialmente se aplican durante la ejecución de las distintas acciones de instrucción, del trabajo operativo secreto y en la práctica pericial. Tiene como finalidad mostrar gráficamente tanto los elementos ocupados íntegramente así como diferentes procesos que demuestran el trabajo pericial, por ejemplo, la coincidencia de dos huellas, una formación celular, un espectro, etc. Además esta especialidad realiza con sus propios medios determinadas investigaciones aplicadas a las huellas y evidencias como pueden ser, la revelación de huellas en estado latente, la detección de falsificaciones de documentos, etc.

La fotografía y el video son medios de mas exactitud que otros medios materiales, ya que dan la posibilidad de grabar sin error todo lo que se encuentra en el campo de vista del investigador, graban los objetos en aquella forma en que se presentan a la vista común, fijan su aspecto exterior, así como la disposición recíproca de los objetos, las huellas y evidencias en el lugar del suceso; no obstante algunos otros datos que caracterizan a los objetos no es posible trasmitirlos a las fotografías o a las filmaciones de video, como son el olor, el estado de descomposición, la humedad, etc. Por ello es necesario aplicarlos únicamente como complemento de otros medios de fijación, de ahí que las filmaciones fotográficas y de video tengan carácter ilustrativo y probatorio en los diferentes procesos judiciales.

Para su uso y aplicación esta especialidad se ha dividido en dos partes: Investigativa y Operativa.

Investigativa: Cuando el Perito en condiciones de laboratorio durante la realización del peritaje criminalístico investiga primero las pruebas materiales e ilustra después el peritaje, por ejemplo, cuando utiliza iluminación ultravioleta para revelar un texto escrito que fuera borrado, etc.

Operativa: Posibilita al Investigador o al Perito, filmar todo lo que se encuentre delante del objetivo o lente de la cámara por lo que se utiliza durante la realización de las diferentes acciones de instrucción y demás diligencias. Su uso Operativo tiene por tanto, los siguientes propósitos esenciales:

La fijación de la Inspección del lugar del suceso y de todo lo que tenga relación con el mismo.

La fijación de los resultados obtenidos en otras acciones de instrucción, tales como, Registros, Experimentos de Instrucción, etc.

La fotografía o filmación que facilita el reconocimiento de objetos, personas o lugares.

La filmación secreta de personas en el momento de la comisión de sus acciones delictivas.

La Filmación del lugar del suceso.

Al efectuarse la inspección del lugar del suceso , acción que puede transcurrir en un determinado período de tiempo, no siempre es posible garantizar que todos los detalles o pormenores del lugar puedan ser reflejados en el Acta, ya que aunque se realice una observación exhaustiva y minuciosa , pueden omitirse inconscientemente particularidades importantes para el hecho que se investiga y que son de trascendencia para probar la participación del autor. Es por esto que se requiere complementar el Acta con filmaciones fotográficas o de video que tomen de forma general y particular el lugar del suceso, de ahí que se hayan establecido determinados tipos de fotografías para estos fines, ellas son:

De orientación: Debe reflejar el lugar del suceso conjuntamente con sus alrededores, reproduciendo el carácter del lugar, la disposición de un edificio en el terreno, el camino o caminos que van hacia el lugar, etc.

De revista: En ella se aprecia el lugar del suceso como tal pero excluyendo a sus alrededores , su propósito fundamental es dar una idea general sobre la situación del lugar. Se debe tener presente que si el lugar del suceso es en exteriores hay que fotografiar toda el área que será inspeccionada, si es en un local, la foto debe recoger además todo el aspecto interior del mismo.

Central: Consiste en reproducir aisladamente aquellas partes del lugar del suceso que tienen mayor importancia desde el punto de vista criminalísticos, es decir donde hay una mayor concentración de huellas e indicios, como pueden ser los objetos utilizados para la comisión del delito, los objetos con los cuales están fundamentalmente relacionadas las acciones del delincuente de éste en el propio lugar.

Detallada: Es la destinada a recoger los detalles, es decir aquellas , huellas, micro huellas o elementos que son de pequeña dimensión pero que requieren estudiarse posteriormente, por ejemplo brechas producidas por disparo de armas de fuego, fibras textiles, pelos, etc.

Métodos que se aplican en la Fotografía.

De modo general, la fotografía puede ser aplicada en forma panorámica, a escala o normal.

Panorámica: Consiste en fotografiar por partes la escena u objeto del suceso, por ser éstos de tamaños considerables y su imagen no sea posible abarcarla en un solo cuadro fotográfico. Para ello puede aplicarse la forma lineal o circular. La primera consiste en tomar varias fotos desplazándonos en línea recta consecutivamente y la segunda en tomar varias fotos situándonos primero de frente y al centro del objetivo; luego, cambiando el ángulo y desde el mismo punto de referencia tomamos varias fotos realizando aproximadamente un movimiento semicircular. (Existen cámaras panorámicas en la actualidad que realizan toda esta operación automáticamente)

A escala: Es el método que permite determinar por la foto el tamaño real de los objetos y sus partes en dos dimensiones, largo y ancho. Por ello este tipo de fotografía se toma situando una escala milimetrada en la parte inferior del objeto.

Objetivos a cumplir en la filmación de cualquier tipo de huella:

Reproducir todos los detalles particulares que están presentes.

Recoger el tamaño de las huellas con exactitud en la foto.

Debe ser fielmente reflejada la forma de la huella.

La filmación del cadáver en el lugar del suceso.

Los cadáveres son también objeto de la toma fotográfica, puesto que durante la investigación de homicidios, atentados, asesinatos, etc.; habrá que resolver sin duda algunas cuestiones referentes al motivo, el tiempo y el lugar donde se produjo la muerte, así como la posibilidad de que se ocasionara la muerte propia de la víctima.

La solución de estas cuestiones se ayudará considerablemente con el análisis minucioso de la postura y disposiciones del cadáver, del carácter de las lesiones y también del estado que presentan las ropas que vestía. Estas circunstancias son bases para la investigación médico-criminalística. Por ello el acta de la inspección necesita de su complemento con las impresiones fotográficas del cadáver.

Son diferentes las formas en que pueden ser hallados los cuerpos de las víctimas, por ello habrá que tener en cuenta algunas particularidades para su filmación según la forma en que aparezca, pudiendo ser entre otras:

Colgados: Deben ser fotografiados desde los dos lados contrarios, de forma tal que se vea si los pies tocan el suelo o no. Si el local donde se encuentra el cadáver es muy reducido, se puede realizar también una panorámica vertical. También es necesario filmar la posición de la soga, en el cuello así como en otra donde pudiera encontrarse y después de quitada esta, el surco equimótico que la misma deja.

Despedazados: Se toman primero tantas fotos de revistas como lugares donde aparezcan las distintas partes. En todos estos lugares se tomará una foto de revista que muestre la parte del cadáver y el lugar donde fue hallado; luego se efectúa la foto central a cada parte por separado. Más tarde, con ayuda del médico legista, se unen los pedazos encontrados y se realiza una nueva filmación de esta forma.

Aquellos pedazos del cadáver que tengan características particulares, así como lesiones, heridas, etc. deben ser filmados detalladamente utilizando el método a escala. También deben ser fijadas fotográficamente las ropas halladas.

Quemados: Para la filmación de los cadáveres, la iluminación debe ser intensa de lo contrario la imagen del cadáver en la foto aparecerá negra y sin detalles. Para aumentar la claridad de la imagen los cadáveres quemados se fotografían como regla general con el fondo blanco.

Sentados: Es preciso, siempre que las circunstancias lo permitan fotografiarlos por sus cuatro lados.

Enfangados: Las fotografías deberán ser tomadas sin falta antes y después de ser lavados.

Enmascarados: La filmación habrá de cumplirse antes de quitar el enmascaramiento, que puede ser ramas, hojas, etc., así como después de haber efectuado esa operación.

A la hora de cumplimentar la fotografía detallada en los cadáveres deberá tenerse presente lo siguiente:

En las heridas de arma de fuego hay que fotografiar el orificio de entrada y el de salida.

En las ropas, fijar las huellas complementarias del disparo.

En los casos de envenenamiento, será objeto de filmación del vómito.

Si se trata de ahogados, se fotografiará la piel macerada y las burbujas que presenta en la boca.

Cuando la muerte fue por la acción de la electricidad se fotografían las marcas producidas por la descarga en el cuerpo.

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